Drogas sintéticas que circulan en BC son más adictivas y peligrosas: Centros de Rehabilitación

Jorge Heras.-
Los estupefacientes que consumen actualmente las personas adictas en la entidad son más “potentes” y al ser combinados con varias sustancias representa un peligro tanto para los usuarios como para la sociedad en general toda vez que bajo los efectos de la droga los adictos mantienen un comportamiento violento, aseguró Santiago Reygosa Cruz, presidente de la Federación de Asociaciones Civiles y Centro de Rehabilitación de BC.
El coordinador de dicha agrupación que aglutina 42 centros de tratamiento en la entidad, señaló que de acuerdo al trabajo de campo que realizan todos los días, no hay incremento en el número de usuarios de las drogas ilícitas, sin embargo aseveró que los narcóticos cada vez presentan más variaciones para aumentar su efecto.
“En este año se está mirando que las drogas hacen más daño al organismo porque las están elaborando con sustancias más fuertes, además antes no se veía el daño inmediato que causaba y no se cometían tantos delitos graves, aunque el robo es un delito grave, ahora muchas veces estamos viendo homicidios y delitos más fuertes”, sentenció.
Reygosa Cruz aseguró que el enervante que más se consume en la entidad, sobre todo en Mexicali es la metanfetamina conocida como Crystal o Ice, cuyos efectos, mencionó, son los más adictivos y más dañinos para el organismo.
Manifestó que la razón por la que hay mayor presencia de este tipo de estupefacientes en las calles es por lo barato del producto, la fácil elaboración y el nivel de adicción que genera.
“Lo preocupante es que cada vez se ve mayor repercusión en las escuelas, en donde se venden dosis hasta por 10 pesos, situación que antes no se veía por qué anteriormente se vendían de 100 y 150 pesos” sostuvo.
El también director del Centro de Rehabilitación “El Hijo Pródigo” comentó que tan sólo en la capital del Estado, los centros de tratamiento atienden a más de 3 mil adictos, por lo que considera es necesario que autoridades de salud y seguridad pública trabajen en conjunto pues según sus cifras, que los usuarios de droga de bajos recursos comentan al menos seis robos por día para seguir con el consumo, “Posiblemente es la misma cantidad de internos pero ahora se miran daños más fuertes”.
Para el coordinador del Grupo 24 horas, José T. los trastornos psicológicos que presentan los consumidores de enervantes, sobre todo los que utilizan drogas sintéticas, son los mismos pero ahora con la elaboración de productos más fuertes se acelera el proceso de intoxicación.
Los efectos que causan los estupefacientes como el Crystal, explicó, van desde la pérdida de memoria, depresión mórdida hasta delirio de persecución y cambios de personalidad.
Indicó que hasta a la marihuana, considerada la droga ilícita más convencional, le han hecho modificaciones para que tenga efectos más intensos.
“El cristal es quien lleva la pauta de las drogas que presentan mayo consumo y esto se debe porque es más barata y ahora para incitar a los menores en los centros escolares fraccionan la sustancia, para que la prueben y después les genere adicción”, agregó.
El administrador de este grupo de ayuda que se ubica en la colonia Libertad en la capital del Estado y que atiende a personas con problemas de adicción desde hace casi 10 años, comentó que el 90 por ciento de las personas que acuden a esta asociación son dependientes de narcóticos. “Hoy en día es muy raro que veas a personas con problemas sólo de alcoholismo ya que la mayoría si no es que todos presentan fuertes adicciones a todo tipo de enervantes”
El «Crystal» o «Ice» es un polvo cristalino blanco, inoloro, que se disuelve fácilmente en agua o alcohol y se puede fumar, inhalar por la nariz, ingerir por la boca o en casos de mayor adicción se inyecta.
En Baja California, de acuerdo al Observatorio Estatal de Adicciones, Alrededor de un 35% de la población entre 10 y 65 años reconoció en una encuesta haber consumido alguna sustancia psicoativa.
Mexicali ocupa el primer lugar en consumo de cocaína y metanfetaminas.