- mayo 24, 2013
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Sentencia benévola para «El Doctor» Arellano Félix por lavado de dinero en San Diego
Lindero Norte
Tijuana.- En la Corte Federal de San Diego, California, Eduardo Arellano Félix, el hermano mayor del Cartel de Tijuana, se declaró culpable de lavado de dinero y actividades relacionadas a este ilícito por lo que purgará una sentencia de 15 años de prisión en Estados Unidos y le serán confiscados bienes por 50 millones de dólares.
Con base en un acuerdo por el que le condonaron cinco delitos grave, la fiscalía exculpó a Eduardo Arellano Félix, “El Doctor” de conspiración para el tráfico de drogas y asociación delictuosa, cuya sentencia es de 20 años de prisión por cualquiera de estos delitos considerados graves. En la determinación judicial no se consideraron la miles de toneladas de droga que supuestamente traficó de Colombia a Estados Unidos.
En este país están prisioneros sus hermanos Francisco Javier, “El Tigrillo”, y Benjamín, “El Licenciado”, líder de esta organización criminal de origen sinaloense que se asentó en el corredor Tijuana-San Diego, a finales de la década de los ochenta, bajo la tutela del Cartel de Guadalajara y la vigilancia de su tío Jesús Labra, “El Chuy”, también extraditado en ese país. Las hermanas Enedina y Alicia también residen en ciudades norteamericanas.
A diferencia de su hermano Benjamín que durante su extradición se mostraba pensativo sobre la suerte de sus hermanos y del cártel que opera en el noroeste de México y el suroeste de Estados Unidos, “El Doctor” se mantuvo sereno al ser enviado al vecino país del norte, en agosto del 2012, donde enfrentaría siete delitos federales vinculado con el narcotráfico y la delincuencia organizada.
La noche del 25 de octubre de 2008, El Doctor fue detenido en un exclusivo fraccionamiento de Tijuana en un operativo militar realizado para capturar a Fernando Sánchez Arellano, “El Ingeniero”, integrante de la segunda generación de los Arellano Félix y en quien recayó la dirigencia de la organización. Eduardo quien se identificó con los militares como Samuel Bracamontes no opuso resistencia toda vez que descansaba junto con su hija menor de edad.
En esa época, los cárteles de Tijuana y Sinaloa libraban una guerra por el control de la esta zona estratégica para el narcotráfico que trajo consigo más de mil ejecutados en esta entidad durante 2008. Luego de una escisión por ser sustituido de la dirigencia de la Organización Arellano Félix, Teodoro García Simental, “El Teo”, encabezó el enfrentamiento del cartel de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo” contra “El Ingeniero”, a quien le demostraba un desdén histórico al llamarle “El Albañil”.
Incluso trascendió que la ubicación de la casa de seguridad donde fue arrestado “El Doctor” Arellano Félix la dio a conocer a los altos mandos de la Segunda Región Militar el propio García Simental. Cuando se comprobó la identidad del detenido, la fuerza castrense se enteró que se trataba de “El Doctor” y no de “El Ingeniero”.
De manera paralela, se logró la captura también de Luis Ramírez Vázquez, «El Güero Camarón», uno de los sicarios del Cartel de Tijuana que contaba con órdenes de aprehensión por homicidio calificado y delincuencia organizada. Las declaraciones de este hombre trajo consigo las detenciones de medio centenar de agentes municipales de Tijuana y de policías ministeriales de Baja California, corporación adscrita al Procurador Rommel Moreno Manjarrez, cuya corrupción y filtración del crimen organizado la documentó después el general Sergio Aponte Polito, comandante de la Segunda Región Militar.