- agosto 26, 2013
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Columna Lindero Norte: Espejismo de justicia
Antonio Heras
El escritor colombiano Gabriel García Márquez advierte que a la reproducción comercial de la realidad le gusta exagerar pero nunca tanto como a la realidad.
Y por supuesto que tiene razón.
Un gran ejemplo es lo que sucede con el Nuevo Sistema de Justicia Penal de Mexicali, el proyecto toral del gobierno de Guadalupe Osuna Milán y que depositó en alguien cuya presencia solo estaba diseñada para permanecer dos años en su gabinete. A lo mucho.
Lo que no has de querer, en tu casa lo has de tener.
El caso es que lo único cierto que ha hecho el todavía procurador de Justicia Rommel Moreno es construir una percepción positiva aunque alegórica sobre este sistema penal.
Por una parte se muestra una idea de funcionalidad, de operación, innovación y tratamiento de primer mundo dirigido a los fuereños. La percepción no es realidad, a veces se contrapone.
Lo que ha hecho Rommel es la transfiguración exterior de la realidad, muy ajena a la interior.
La realidad es más que una presentación de power point, un cóctel en hoteles de lujo, un “masaje visual” a los invitados que se van con la idea del perfeccionamiento de un sistema penal que ha hecho, hace y hará agua mientras no se revise su columna vertebral.
Este NSJP vive dos realidades. La exterior y de reuniones de Rommel con Osuna Milán y su equipo, por una parte, y la cotidiana en los juzgados, en los números únicos de caso, en la instrucción de recibir casos para no incrementar la incidencia delictiva en la entidad y la creación de “un cuello de botella” que deberá resolver de algún modo el Poder Judicial.
Más que una simulación de la realidad se trata de una transfiguración de la realidad que Osuna Milán defenderá como concepto cuya motivación de sus detractores solo buscarían empañar su paso por la administración pública estatal.
Al tiempo, Osuna forma parte de ese engaño institucional que simula un globo aerostático que le explotara en las manos al próximo gobernador.
Si, Francisco Vega verá como se deshace un sistema de justicia armado como un Frankistein que estará obligado a revisar para hacer cambios de fondo. No le queda de otra.
El nuevo procurador estará obligado a revisar el mapa de navegación para resolver las insuficiencias y limitaciones de Mexicali para ser reorientadas mas allá del discurso y para su instrumentación en Tijuana y Ensenada.
No todo esta mal, por supuesto, pero al quitar a Rommel el panorama se verá tal y como es: desértico, inacabado, famélico.
La gran asignatura pendiente es la atención a víctimas.
A Rommel Moreno no le preocupa porque ya se va e intentara venderles espejismos y bisutería a la Federación y a otras entidades del país.
Por cierto, hay quien asegura que a la doctora Juanita Alavés le quedaron muy bien los contenidos de los dos primeros libros de difusión de la experiencia del NSJP en Baja California que firma como autor el señor Rommel Moreno Manjarrez.
Leyendas urbanas?