Basurero «El Jibarito», problema de salud pública. Suspenden el depósito de basura

El Gobierno de Baja California suspendió las actividades del depósito de basura de El Jibarito que opera la empresa Norbac en una zona poblada del poniente de Tijuana por anomalías en el manejo de residuos y la emanación de biogás que representa un problema de salud pública y perjudicial al ecosistema.
Los colonos exigieron el estudio de las consecuencias de estas emanaciones de gases tóxicos entre la población y el medio ambiente para sanear este sitio y se convierta en un área verde e impedir que se utilice como basurero por estar situado en una zona poblada.
El pastor Albert Rivera, quien encabeza esta lucha social al documentar 800 casos de enfermos a consecuencia del basurero, dijo que esperarán el diagnóstico de peritos de materia ambiental que se comprometió la Profepa para determinar las acciones que realizarán los pobladores de la zona. Son 60 años de contaminación, agregó, los colonos ya nos merecemos una mejor calidad de vida, ajenos a la basura.
El Subsecretario General de Gobierno, Javier Gutiérrez Vidal, dio a conocer que la decisión de la Secretaría de Protección al Ambiente se mantendrá hasta que no se mitiguen los daños causados.
El 24 de septiembre de 2014 personal de la SPA ejecutó una orden de inspección al relleno sanitario donde encontró múltiples anomalías en su operación, pues no cumple con las restricciones de la norma oficial mexicana NOM-083-SEMARNAT-2003, la que regula los sitios de disposición final de residuos sólidos urbanos.
Gutiérrez Vidal dijo que el basurero cuenta con una micro celda de reciente apertura con una superficie de 1,800 metros cuadrados aproximadamente, la que ya está en operación con acumulamiento de residuos, sin contar previamente con la autorización en materia de Impacto Ambiental que expide la SPA, la cual no se exhibió al ser requerida.
Para el acceso a la micro celda la empresa realizó trabajos con maquinaria para acondicionar caminos interiores por lo que quedó expuesta la basura confinada por los cortes en sus taludes, los cuales colindan con casas habitación, sin mediar barrera física alguna por el lado norte, de la zona conocida como El Cañon de las Carretas.
En la macro celda, dijo, se observa el deslave de taludes por la acción de las lluvias y la erosión total del suelo,  lo que provoca la exposición de los residuos y la dispersión por el viento, así como grietas, lo que provoca inestabilidad y zonas de alto riesgo colindantes con la zona habitacional.
Durante la inspección se percibieron olores desagradables de biogás emanados de la macro celda, situación que afecta a la población, toda vez que no se le da una conducción y control con repercusiones peligrosas para los ecosistemas y la salud pública.
Ante el peligro inminente, la autoridad estatal suspendió de manera temporal la recepción y disposición de residuos en el sitio por lo que se colocaron sellos sobre la báscula de ingresos de camiones y la entrada a la celda.
Esto «no impide que se realicen obras de saneamiento en el sitio por parte de los propietarios», señala el dictamen.