- febrero 27, 2013
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Columna Cicuta: Yerros
Jaime Flores Martínez
Convencido que “exhibía” ante el mundo a 62 policías de Tijuana vinculados con el narcotráfico, el procurador de Justicia de Bajá California Rommel Moreno Manjarréz se atraganta –a la distancia– con sus propias palabras. Todos los policías arrestados (y a los que no aprehendieron) fueron exonerados.
Todos ellos le deben a Rommel que su vida se haya triturado y su reputación se haya despedazado. Mientras muchos de ellos pasaron hasta dos años en la cárcel, el licenciado Moreno goza de la vida en su gimnasio privado o duerme bajo el cálido aliento de su ángel de la guarda.
Muy interesante resultaría conocer qué explicación le daría el procurador Rommel Moreno al Gobernador Osuna Millán. Recordemos que aquel 29 de julio de 2010, en la base militar de la colonia 70- 76 de Tijuana, un total de 62 policias (entre municipales y estatales) fueron exhibidos ante los medios de comunicación como delincuentes vinculados con el narcotráfico.
Uno de ellos –identificado como Pacheco—desafió a los guardias e interpelo al procurador al recriminarle que “siempre le había sido fiel”. Presente estaba el secretario de seguridad pública estatal Daniel de la Rosa Anaya, quien maquinó esta perversa maraña junto con el entonces secretario de gobierno Francisco Blake Mora.
En la mente de ambos se concibió la estrategia para arrestar a un total de 102 policías, aunque las cosas no salieron como estaban planeadas: solamente lograron aprehender a 62 policías y el resto fueron considerados prófugos. Nada más 2 de los arrestados esa mañana continúan en prisión.
Aquellos que tuvieron la mala suerte de recibir un trato injusto, les destrozaron su reputación. Todos ellos dejaron a su familia en el desamparo y debieron pasar dos años antes de ser exonerados. A esa distancia, el señor procurador no se ha referido al caso. Nunca se atrevería decir que se equivocaron y que por su culpa esas familias pasaron momentos terribles.
Esos policías resultaron inocentes y el fiscal del Estado se voltea para otro lado. Rommel pretende que su gravísimo error pase desapercibido. Cicuta tiene en su poder la copia de una resolución del Juzgado Segundo de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales del estado de Tamaulipas, donde se reitera que “queda insubsistente la orden de aprehensión del 2010, dictada dentro la causa penal 37/20 10/7, girada en contra de los elementos de la Policía Ministerial del Estado.
La resolución integra la negativa de la orden de aprehensión en contra del ex policía ministerial Ricardo Groves Malo, quien de milagro se salvó de ser detenido, exhibido e injustificadamente arrestado.
Hace año y medio Cicuta se refirió al tema donde el agente Groves Malo fue dado de baja de la corporación por faltas acumuladas. Nunca la dependencia argumentó supuestos vínculos con el narcotráfico, aunque intentaron arrestarlo ese 29 de julio de 2010.
El 22 de noviembre del año pasado, el Juzgado Federal resolvió que quedaba sin efecto la orden de aprehensión en su contra pues nunca se comprobó que tuviese algún vínculo con la delincuencia. En pocas palabras, la fabricación de esa historia resulto burda. Rommel Moreno respondió a las macabras ideas de dos miembros del gabinete osunista y sus achichincles fueron los encargados de ejecutar.
No obstante, la historia giró sobre el mismo eje y tuvo el final esperado. Lo cuestionable es que los funcionarios involucrados gozan de la vida y mantienen su cargo. El resumen es que esos policías están absueltos de cualquier cargo, mientras el su verdugo Rommel disfruta del cálido aliento de la vida.
Ansias
Los panistas de Tijuana andan tan ansiosos que hasta decidieron armarle el gabinete a su aparente presidente municipal Alejandro Monraz Sustaita. Sin importarles despedir un aroma a drenaje, esos blanquiazules diseñan ahora mismo el grupo que acompañaría a Monraz.
Cicuta está en posibilidades de revelar que la estrategia nace en la mente del ex alcalde de Tijuana Jorge Ramos Hernández, asesorado por la brillantísima comunicóloga Gabriela Morgado, alimentadora de la autoestima de Ramos Hernández. Con su valioso apoyo, ex alcalde Ramos le prepara una carpeta a quien ubica como su próximo presidente municipal.
Entre las novedades que pueden comentarse, destaca la posibilidad de re-contratar al teniente coronel Julian Leyzaola Pérez como Secretario de Seguridad Pública Municipal. De regreso en el tiempo, Leyzaola relevaría en el cargo Alberto Capella Ibarra.
Ya en este espacio se informó que la ex senadora Irma Martínez sería la próxima Secretaría de Educación Municipal, aunque pertenezca al partido Nueva Alianza. Se supone que esto es parte del acuerdo entre ambos partidos.
El caso es que Julián Leyzaola todavía despacha como secretario de seguridad en Chihuahua, donde aplauden los buenos resultados mientras se publican escandalosas cifras de personas muertas. En Chihuahua han caído en cumplimiento de su deber cualquier cantidad de policías, igualito que sucedió en Tijuana.
Sin embargo, los medios de comunicación chihuahuenses no han referido que Leyzaola abra las bolsas donde se guardan los cadáveres para golpearlos en la cara. Leyzaola decía que los delincuentes “chillaban como viejas”, aunque hasta donde se sabe los cadáveres no chillan.
El caso es que Jorge Ramos es el estratega de Alejandro Monraz rumbo a la alcaldía de Tijuana. Los habitantes de Tijuana sabrán entonces qué decisión tomaran el próximo 7 de julio. Un bien numero de habitantes de Tijuana recuerdan que con Jorge Ramos, a Tijuana no le fue bien.
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0 Comentarios
HOLA COMO PUEDO ENVIARLES UN ESCRITO SOBRE EL ASESINATO DE MEXICALI Y BAJA CALIFORNIA, PARA QUE LO PUBLIQUEN O TOMEN LO QUE CONSIDEREN DE VALOR.? GRACIAS
Raymundo Marquez
Que tal Raymundo, lo puedes enviar al correo: lindero.heras@gmail.com . Gracias por tu preferencia